Si eres de los que te gusta transitar en moto o bicicleta, debes estar consciente que mas allá de tener los conocimientos para manejar correctamente debes protegerte en caso tal de algún tipo de accidente. El uso de los cascos de bicicleta es importantísimo, ya que te ayuda a reducir riesgos por traumatismos cráneo encefálicos, y disminuye el impacto de una fuerza o colisión en la cabeza.
A la mayoría de los niños del mundo también se les regala una bicicleta y eso trae consigo tener que comprar rodilleras, coderas y casco para protegerlo de las posibles caídas mientras aprenden a controlar el equilibrio y manejar bien su bicicleta.
El material incorporado en los cascos de bicicleta absorben parte del impacto y, en consecuencia, la cabeza se detiene con más lentitud. Existen muchos tipos de cascos: de carcasa dura y suave, pero, que tal un caso que puedas elaborar tu mismo y a la vez te proporcione seguridad.
Los diseñadores están recurriendo cada vez más a alternativas al plástico, y un reemplazo popular proviene de los hongos. Los expertos están experimentando con micelio para todo, desde materiales de construcción hasta moda y ahora equipamiento deportivo, como cascos de bicicleta. Un nuevo proyecto permite al consumidor ‘Cultivarlo usted mismo’ para evitar el plástico sin sacrificar la durabilidad.
Cascos de bicicleta para Niños
Grow it Yourself no es solo un eslogan, sino una idea que se ha materializado en un producto de diseño ecológico diseñado para niños. Creado por NOS Design en la Ciudad de México fue el impulsor de este interesante proyecto que mira hacia un futuro mejor.
La consultora en diseños y desarrollo de productos, conjunto con Agustín Otegui en colaboración con Diego Mata y Axel Gómez-Ortigoza, el casco Grow it Yourself es 100% compostable, transpirable y resistente a los impactos.
NOS Design desarrolló la idea junto con Polybion, la compañía a la que se le atribuye el desarrollo de un producto similar a una espuma llamado Fungicel hecho de micelio.
El equipo fabricó un casco protector hecho de heno y micelio de hongos, que se desechará en poco tiempo debido a la velocidad de crecimiento del niño pero reduce así el uso de plástico.
Sus creadores expresaron: “Involucrar a los niños en la elaboración de los productos que utilizan es una excelente manera de conectarse y ofrecerles una experiencia gratificante una vez que hayan terminado esta experiencia. Usar materiales orgánicos que puedan ver crecer es una mejor manera de enseñarles la importancia de la sostenibilidad«
La combinación de heno y micelio, hace que el casco crezca literalmente a partir de materiales naturales que se descompondrán nuevamente en el suelo aproximadamente un mes después del ciclo de vida del casco.
El material además de ser ecológico, le ofrece al ciclista protección ante los impactos, y no se utiliza la espuma plástica a base de petróleo, que es peligrosa para el medio ambiente y se encuentra típicamente en los cascos. Además, el micelio es asequible y naturalmente resistente al fuego.
El producto está dirigido a todos los usuarios, pero fue desarrollado especialmente para niños que rápidamente superan los cascos, quizás requiriendo varios antes de llegar a la edad adulta. Además, el casco Grow it Yourself proporciona una alternativa para los viajeros que dependen de los sistemas comunitarios de préstamo de bicicletas que no ofrecen protección personal.
En su página web mencionan: «El crecimiento urbano lleva a nuevos sistemas de movilidad alternos como bicicletas, scooters y motocicletas entre otros. La regulación de los mismos es ambigua y el acceso a estos medios de transporte es libre para cualquier persona que tenga un smartphone. Sin embargo estas empresas no brindan ningún sistema de seguridad para los usuarios».
El micelio es un sistema ramificado en forma de red de filamentos llamados hifas. El ciclo de fabricación de compuestos de micelio comienza con esta parte vegetativa natural de un hongo . Si bien se obtiene de forma natural, también puede generar empleos y crecimiento económico en áreas rurales que tienen espacio para propagar el hongo. De hecho, puede cultivarse en su propio patio trasero, lo que le permite cultivarlo usted mismo.
El micelio no es nuevo en el mercado de desarrollo de productos. De hecho, está ganando atención rápidamente dentro de la industria de la construcción como alternativa al cemento. También está «creciendo» en popularidad para su uso en envases, paneles acústicos y materiales de diseño de interiores , entre otros productos.