La Organización estadounidense sin fines de lucro «Mars Society» dedicada a explorar el planeta rojo (Marte) organizó un concurso como parte de los trabajos científicos. El proyecto «Nüwa ciudad sostenible en Marte» clasificó como finalista entre los 175 proyectos que participaron para la competencia del año en curso. Abiboo fue la firma de arquitectura encargada de presentar el diseño para una ciudad en Marte.
En la convención de la Mars Society llevada a cabo en el mes de octubre, asistieron personas realacionadas al sector como Elon Musk de Space X, Jim Bridenstine de la NASA y George Whitesides de Virgin Galactic.
Abiboo ha colaborado con la red SONet para el proyecto de Nüwa y ha trabajado de forma remota desde varios destinos globales. Esta red está compuesta por un equipo de científicos internacionales y expertos en astrobiología, ingeniería espacial, arquitectura, astrofísica, psicología, química y astrogeología, encabezado por el astrofísico Guillem Anglada.
Guillem Anglada, coordinador del proyecto describe a la propuesta como un «esfuerzo por combinar muchas disciplinas de una forma que no se suele hacer en proyectos del espacio». También enfatizó que, la ciudad de Nüwa simboliza el inicio de una nueva civilización en Marte y fue llevado a cabo en honor a la diosa china que creó la humanidad.
Nüwa Ciudad sostenible en Marte.
El concepto de sostenibilidad es para eliminar la dependencia del Planeta Tierra. Es decir, que la infraestructura debería ser capaz de expandirse y mantenerse por sí sola sin necesidad de ejercer más presión sobre el planeta que habitamos actualmente, explicaron los expertos.
Debido a las únicas condiciones atmosféricas existentes y con intención de hacerles frente, el diseño de la ciudad sostenible en Marte presentó un concepto vertical integrado ubicado en el costado de un acantilado. «Al ser vertical no es súper extensa en la superficie, al contrario, es más denso y tiene mayor cohesión urbana y social», explicó el experto astrofísico.
Hay cinco ciudades (núcleos urbanos), la ciudad capital es Nüwa, y cada una de ellas tiene una capacidad entre 200.000 y 250.000 de habitates, además, conlleva la misma estrategia urbana, ésto con el propósito de que sean lo adecuadamente flexible para poderse ejecutar en diferentes áreas de la superficie del planeta.
De ejecutarse su construcción, tardaría aproximadamente 50 años, la ciudad capital sería construida verticalmente (excavada en la roca), y estaría protegida de la radiación solar por cúpulas.
El propósito no es transformar Marte, sino de crear volúmenes con ambientes internos similares a los que tenemos a los de la Tierra.
Los grandes espacios perforados en la roca están compuestos por «Macro edificios» modulares y tubulares que se ubican en los acantilados a través de túneles con bastantes kilometros de extensión, diseñados especialmente para incluir no solamente espacios residenciales si no también de trabajo. En ellos se encontrarían también parques y espacios «abiertos» visualmente que siempre estarían protegidos tanto de la presión como de la radiación solar.
Cada módulo mide 10 x 60 metros e incluye dos pisos con áreas verdes, espacios de arte, huertos urbanos y áreas de condensación que contribuyen a disipar el calor y el aire limpio.
Para promover el bienestar físico y mental en «Nüwa ciudad sostenible en Marte» se incluirán los espacios verdes comunitarios, en el que estarán animales y cuerpos de agua, es decir, uno que actuaría como parque recreativo y otro dedicado a la vegetación experimental.
Ahora, ¿Cómo sería el traslado de los habitantes a la ciudad de Nüwa?. El profesor de Aeronáutica de la UPC, Miquel Sureda, explicó que desde el proyecto estiman enviar cada año unas 1.000 personas y el viaje de traslado duraría aproximadamente unos 250 días.
¿Cómo sería la producción de alimentos y energía para consumo?. El planeta rojo es rico en elementos como el hierro, a partir de la atmósfera se podrían generar los plásticos y con agua producirse materiales orgánicos. Cabe destacar que el material sería bastante costoso, de hecho, 100 veces más caro en Marte que en la Tierra, y con respecto a la producción de energía sería muy parecida a la producida en nuestro planeta, es decir, una combinación de fotovoltaica, nuclear como apoyo y energía de concentración solar.
Para reducir drásticamente la necesidad de ganadería, los creadores del proyecto le proponen a los habitantes optar por una dieta basada en vegetales principalmente.